El mayor placer para mí como estudiante de matemáticas, es llegar al capítulo en el que aparecen los dibujitos. Tras una larga apnea por el mundo de la teoría abstracta, de pronto todo encaja y ¡hasta tiene forma!
El mayor placer para mí como estudiante de matemáticas, es llegar al capítulo en el que aparecen los dibujitos. Tras una larga apnea por el mundo de la teoría abstracta, de pronto todo encaja y ¡hasta tiene forma!