Somos infinitas personas en este mundo. Siempre encontraremos gente que nos acompañe. Pero eso no basta, gente nueva trae incertidumbre y no podemos vivir siempre en la incertidumbre por eso, solemos la construcción de una familia. Cuando una familia se forma, todos los que pertenecen a ella parecen convertirse en indispensables. Dicho así suena estéril, vacío de significado. Pero hay que vivirlo desde dentro.
Cuando falta una persona todo se derrumba, y no queda otra que prestar atención a todos, para no arrastrarnos unos a otros al vacío. Cuando falta una persona, te das cuenta de lo mucho que significaba en tu día a día y es una sensación que impide incluso respirar. Cuando falta una persona es como si te la hubieran extirpado de las entrañas.
La vida me sonríe pero me falta una persona.
A mí hace dos meses y medio una persona también…yavme faltaba alguna pero esta era, como tú bien dices, clave. Y cuando me acuerdo tengo esa sensación que describes de faltarme de pronto el aliento. También soy feliz pero también me falta una persona y me temo que me fatará siempre, todos los días de mi vida. Hago mío tu post. Me ha encantado y me ha estrujado el corazón.
Gracias 🙂 En mi caso se que la volveré a ver porque no se ha ido de este mundo, pero ante la incertidumbre me siento impotente… Sea como sea, justo esa persona no debía haberse ido.
Fíjate que es tan potente, lo hecho tan mío, que me he idententificado con la reciente muerte de mi padre. Piensa que al menos en tu caso no se ha ido de este mundo y por tanto puede ser una situación rreversible pero entiendo que por mucho que esa persona esté viva, si no está a tu lado te falta. Punto. Y la ausencia duele. Mucho.