Hace tiempo ya que soy adulto. No maduro, ni mucho menos, pero adulto. Digamos que he pasado ese punto de no-retorno a partir del cual lo unico importante son mis decisiones y la responsabilidad última sobre mi desarrollo la cargo yo. Ayudas se agradecen pero no resuelven nada, no definitivamente, ya que esa energía, si no se invierte en un ciclo estable no me dotará de resiliencia real.
Frente a esa situación, mi foco está en desarrollar una estrategia estable. Claro está que en la práctica es algo que se define a medida que ocurre y la realidad no sique un modelo concreto, pero quienes gozan de una visión científica del mundo, saben que modelizar puede ser divertido y práctico.
No hay nada más práctico que una buena teoría.
Juanjo Pina en Facebook
En los años pasados hice ya varios intentos de «modelos de tomas de decisiones», en la búsqueda de un métoco que me garantice decisiones satisfactorias. Mi modelo más reciente, cuyo objetivo original era crear una especie de porfolio de caminos a tomar, dada la gran cantidad de factores a tener en cuenta, desembocó en un mapa mental que reúne dichos factores de una forma general. Quizás demasiado general, pero quizás útil como base para desarrollar e interrelacionar planes más concretos en el futuro o quizás para otra cuestión meramente filosófica. Objetivos que persigo a la hora de crear mapas de este tipo, más allá de mejorar mi enfoque a la hora de mi toma de decisiones cotidiana, es desarrollarme de forma más profesional (?) en mi afición (?) de estratega y en la creación de mapas mentales en sí, un arte que aprendí de mis padres y que tiene mucha chicha que desarrollar (papá, mamá: sentíos orgullosos).
En el centro está la toma de decisiones (personales) como objetivo principal del modelo. La rodean los que creo que son los cuatro factores que influyen en ella a nivel personal (si hacemos una analogía con el tablero de Go, factores a tener en cuenta a nivel local), cualidades (intrínsecas del individuo), recursos (al alcance del individuo), deseos (cuya persecución otorga felicidad al individuo) y planes (acciones a tomar o como mínimo opciones a tener en cuenta). Cuando terminé de dibujar esos cuatro factores me di cuenta de lo individuocéntrico del mapa y para compensarlo, dado que es casi más determinante, terminé remarcando la retroalimentación que debe existir con la comunidad, a la que en este dibujo trato como súper-individuo, pero que realmente es una red de individuos, lo cual hace la cosa más compleja de modelizar.
Como reflexión final, por una parte opino que este mapa es todavía demasiado hipotético y abstracto, por otra parte estoy considerando la necesidad de una representación más cíclica y descentralizada de los factores, en la que la toma de decisiones es el espíritu que todo lo envuelve. Además quedaría abierto trabajar en aplicaciones del modelo a cuestiones más particulares para refinarlo y acabar satisfaciendo necesidades reales.
En próximos arrebatos de mapeo (si los hubiese) puede que me dedique a modelizar flujos (el orden de los factores importa) y a particularizar con ejemplos reales de mi vida.